domingo, 27 de julio de 2008

Pedro Álvarez
Mestro de UCDM Mataró

Cuantas veces habré escuchado la frase "Busca en tu interior".Pero, ¿cómo buscar? y ¿en el interior de qué? ¿Dentro de mi cabeza?¿Dentro de mi estomago?¿Dónde esta mi interior?¿Debía primero localizar mi interior? Pero, ¿cómo?


Meditación, Visualización, Introspección, búsqueda de la sensación interna.Elementos no tangibles, que podía relacionar con algo que yo era, pero que solo podía percibir en determinados estados.


Como saber si era eso y no fases de imaginación exacerbada, la cual en su intento de encontrar algo a lo que agarrarse diseñaba o creaba estructuras falsas imaginadas en intentos de localizar lo ilocalizable, o de encontrar lo que se hallaba en mi interior, sin saber exactamente que buscaba o perseguía.Tanto la visualización de mundos interiores, como el control de los sueños me acercaban a un parámetro de referencia, podía visualizar mundos interiores y luego colocarme en ellos, los cuales parecían tan reales que las sensaciones de caminar, sentir, etc. incluso la información que recibía parecía totalmente ajena a mí.


Podía llegar a tomar conciencia de los sueños, despertar dentro de un sueño y seguir soñándolo intentando buscar las diferencias reales que existían entre un mundo que consideraba real y el soñado, la única diferencia era que tenia conciencia de que soñaba, pero podía realizar cualquier acción dentro del sueño, desde vestirme, lavarme, o salir con otras personas y parecía totalmente real, mi mente aparte de tener conciencia durante todo el desarrollo del sueño de que soñaba, era incapaz de diferenciar la información que recibía, como real o soñada.

¿Eran esos mundos mi interior?¿Cómo diferenciaba interior y exterior?
Un día sin saber bien como la diferencia entre ambos, interior y exterior desapareció, el mundo en el que creía estar incluido y que consideraba real, como exterior y ajeno a mi se introdujo en mi interior quedando exteriorizado de mi mundo exterior.

Era increíble, por fin había encontrado ese interior que buscaba, siempre había estado en mi exterior, y no era consciente de que me ubicaba en el interior de mi exterior.


La mente en un giro inesperado me había revelado la carencia de exterior, todo sucedía en mi interior.


Después de buscar durante tanto tiempo encontraba el fruto de lo buscado, pero era tan increíble y tan monumental el engaño que imposibilitaba su revelación, nadie jamás lo creería si no lo experimentaba.


Tanto tiempo buscando el acceso a mi subconsciente, creyendo que se hallaba dentro de mí, y resultaba que me hallaba dentro de mi propio subconsciente.
Creemos que existen mundos reales y no hay tal cosa como la realidad, sino tan solo un falso concepto de realidad, no existe la realidad, sólo nosotros somos reales, los mundos reales son siempre imaginados por lo seres reales en su interior.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio